erailketa urtegiko langileen artean - asesinato entre los trabajadores del embalse

Albistea 1954ko urriaren 3an eman zen Landako tren geltokiaren auzoan, konkretuki Hiru Txulo tabernaren ondoan. Izugarrizko albistea izan zen, urtegiko obretako langileetariko batek beste bati eraso eginda hilik utzi baitzuen. Biharamuneko prentsak berria ematen zuen:

La noticia se dio el 3 de octubre de 1954, en el barrio de la estación de ferrocarril de Landa, concretamente junto al bar Hiru Txulo. Fue una noticia tremenda, ya que una persona murió tras una agresión de otra, ambos trabajadores en las obras del embalse. La prensa del día siguiente ofrecía los detalles de lo sucedido:

“Alrededor de las ocho menos cuarto de la tarde de ayer domingo se desarrolló un sangrieno y luctuoso hecho entre dos obreros que trabajaban como peones al servicio de la empresa “Construcciones Arregui S.A” que tiene la contrata de la construcción de pantanos y presa de “Saltos del Zadorra S.A” en Ullivarri Gamboa del Ayuntamiento de Arrazua Ubarrundia.

Parece ser que en el merendero de Landa, existente a pocos metros de la Estación del Ferrocarril de Vitoria a Mecolalde (Arlabán-Landa) se encontraron Antolín Bonamez, de treinta y un años de edad, y Andrés Serrano, compañeros de trabajo y amigos, los cuales pretendían a una criada de dicho establecimiento. El primero de ambos sostenía, al parecer, relaciones amorosas con ella, cosa que no veía bien Andrés, quien ayer al encontrarse con su compañero en el baile que todos los domingos y días de fiesta se tiene en el citado merendero, sin que mediara discusión en público, requirió a Antolín para que saliera, ya que tenía que hablar con él. Este accedió y ambos salieron juntos al exterior del merendero, y en el camino que existe junto al río y la Estación, con un cuchillo de gran tamaño arremetió Andrés de frente a la víctima que cayó en medio de un gran charco de sangre. A los gritos del infortunado Antolín salieron los que en el interior del merendero se encontraban, no pudiendo hacer nada ya por evitar un fatal desenlace. El herido era ya cadáver.

En la mañana de hoy ingresó en la Prisión Provincial de Vitoria el homicida, que ha sido puesto a disposición del Juez de Instrucción para su inmediato procesamiento. Andrés Serrano tiene 46 años, es natural de Vado-Conde, de Aranda de Duero, y es soltero. Antolín Bonamez, de treinta y un año, es natural de un pueblecito de la provincia gallega de La Coruña. Tanto los encargados como sus compañeros de trabajo dicen que la víctima era un buen trabajador y formal. No así el homicidio, que tenía fama de pendenciero y bebedor, y mostraba unas cicatrices que decía se las habían inferido en riñas. Tanto la víctima como el agresor eran amigos y Antolín desconocía en absoluto los celos que tenía Andrés.

Parece que momentos antes de consumarse la muerte, Antolín ofreció de beber a Andrés, y éste desechó la invitación, y fue cuando le dijo que quería hablar a solas y fuera. De improviso cogió a la víctima la brutal agresión de su amigo y compañero de trabajo y no hubo entre ambos lucha alguna. El arma homicida apareció en el seno del pequeño cauce del río que corre junto al merendero de Landa, y fue hallado por la Benemérita del puesto de Villarreal de Alava, que es la que intervino en el suceso, deteniendo al agresor que confesó su crimen”