Uribarriko bilobak - Nietos de Ullibarri
Pedro Felipe (Ruiz de) Azua |
Tomas Ruiz de Azua Saenz de Arzamendi uribarritarrak karrera handia egin zuen Txilen, aurreklo batean ikusi genuen moduan. Gaurkoan haren bi semeren biografiak dakartzat.
El ullibarritarra Tomas Ruiz de Azua Saenz de Arzamendi desarrolló, como vimos en entrega anterior, una gran carrera en Chile. Si cabe, la biografía de dos de sus hijos es aún más brillante, y las traigo para general conocimiento.
En el Diccionario de la Real Academia de la Historia de España se lee:
Azúa Iturgoyen, Pedro Felipe. Santiago de Chile, 29.V.1693 baut. – Cartagena de Indias (Colombia), 2.IV.1754. Arzobispo de Santa Fe de Bogotá.
Retoño de una importante familia chilena, hijo de Tomás Ruiz Azúa, regidor de Santiago y corregidor de Valparaíso a principios del siglo XVIII, cursó sus estudios en el Real Convictorio de San Francisco Javier de Santiago de Chile, luego en el Colegio de San Martín de Lima (1703-1711), ambos establecimientos jesuitas. Licenciado en Cánones (13 de febrero de 1711) y unos meses después doctor en ambos Derechos por la Universidad de Lima, regente de Cánones por la misma universidad (1711-1713), abogado de la Audiencia de Lima (29 de octubre de 1711), fue recibido en 1714 letrado por la Audiencia de Santiago de Chile.
Acumuló entonces una impresionante serie de cargos menores que conjuntamente le daban acceso a todos los resortes del poder local: abogado de pobres (1714) y relator (1715) de la Audiencia, asesor de la curia episcopal (1715), asesor del gobernador de Chile (1715), abogado y asesor del Cabildo Civil de Santiago (1715-1716 y 1717-1723), protector general de los indios del reino de Chile (1718), auditor de guerra del Gobierno.
En 1722 se ordenó y consiguió inmediatamente la canonjía doctoral de la catedral de Santiago siendo el único opositor. Comisario de Inquisición en Santiago (ant. 1727), fue nombrado, en 1728, provisor y vicario general de la diócesis por el obispo Juan Pozo Silva, cargo en el que le confirmó el sucesor de éste, Juan Sarricolea (1731), persona como él muy ligada a la Compañía de Jesús. Canónigo maestrescuela de la catedral (3 de diciembre de 1733), canónigo tesorero (4 de septiembre de 1734), fue elegido, en 1735, por el obispo de Concepción, Salvador Bermúdez Becerra —otro antiguo alumno de los jesuitas—, como auxiliar suyo para la isla de Chiloé, con el título de obispo in partibus de Botria. Al ascender Bermúdez al obispado de La Paz, le sucedió como obispo de Concepción (27 de diciembre de 1741), donde celebró un sínodo diocesano (1744) y reedificó la catedral destruida por el terremoto del 8 de julio de 1730, invirtiendo en ella importantes fondos propios.
Nombrado arzobispo de Santa Fe de Bogotá (18 de diciembre de 1744), pudo consagrar la catedral de Concepción antes de dejar la ciudad (1746). Consiguió del Rey tres títulos de Castilla por vender, para resarcirse de los gastos hechos en el edificio. Dimitió en 1752 de la mitra de Bogotá por razones de salud, con 8.000 pesos anuales de pensión y el propósito de retirarse a Lima. Murió en su viaje a aquella ciudad.
Había fundado un mayorazgo a favor de su hermano Tomás.
Tomas (Ruiz de) Azua |
TOMAS AZUA ITURGOYEN
Los datos que doy a conocer los he extractado del libro “Historia de la Universidad de San Felipe, de
Santiago de Chile” (J.T.Medina. 1928)
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